La diputada por Nueva York masacró con elegancia al congresista republicano Ted Yoho después de llamarla “maldita perra” y pronunciar unas falsas disculpas.
Ocasio-Cortez responde a los insultos machistas de un congresista: "Tener una hija no hace decente a un hombre. Tratar a las personas con dignidad y respeto, sí"
https://www.eldiario.es/opinion/alexandria-ocasio-cortez-mujeres-no-callan_129_6130195.html
Transcripción del discurso feminista de Alexandria Ocaso-Cortez
https://www.rtve.es/playz/20200724/alexandria-ocasio-cortez-su-iconico-discurso-feminista-lenguaje-violento-contra-mujeres/2032021.shtml
"Hace unos días subía las escalera del Capitolio cuando el legislador
Yoho, acompañado por el legislador Roger Williams, me abordó. Yo estaba
a mis cosas cuando el señor Yoho puso su dedo en mi cara y
me dijo que yo era repugnante, me llamó loca y peligrosa. [...]
Después, delante de la misma puerta del Capitolio, el legislador Yoho me
llamó literalmente 'una jodida puta'".
"Estas fueron las
palabras de Yoho contra una congresista. Una congresista que no solo
representa a Nueva York, sino también a cada mujer de este país. Porque
todos lidiamos con este tipo de comentarios en algún momento de nuestras
vidas. Y quiero dejar claro que los comentarios del legislador Yoho no
me hacen daño, porque he trabajado como camarera, en el metro, he
pateado las calles de Nueva York y este lenguaje no me resulta nuevo. He
llegado a echar a hombres de bares por usar ese mismo lenguaje que el
señor Yoho y me he topado varias veces con ese tipo de acoso en el metro
de Nueva York. El problema precisamente es que no es nada nuevo. El señor Yoho no estaba solo. Iba andando hombro con hombro con el legislador Roger Williams, y ahí es cuando vemos que esto no es un incidente. Esto es cultural.
Es la cultura de la impunidad, de la aceptación de la violencia y del
lenguaje violento contra las mujeres, y de toda una estructura de poder
que lo respalda. Porque no solo es que me hayan hablado
irrespetuosamente miembros del partido republicano, es que el propio
Presidente de Estados Unidos me dijo el año pasado que me fuera a mi
casa, dando por hecho que ni siquiera pertenezco a Estados Unidos. El
lenguaje deshumanizado no es nuevo, y lo que vemos en este tipo de
incidentes es un patrón de conducta hacia las mujeres y de deshumanización del otro".
"No
me dolió especialmente ese comentario, honestamente volví a mi casa
pensando que había sido un día como otro cualquiera. Pero no voy a dejar
pasar las 'disculpas' que ofreció ayer el legislador Yoho aquí mismo en
la Cámara de Representantes. No lo voy a consentir por mis sobrinas,
por las niñas, por las víctimas de la violencia verbal, que vean que esa
excusa en nuestro Congreso se acepta como legítima y como una disculpa,
con el silencio como forma de aceptación".
"Yo no necesito que el
legislador Yoho me pida perdón. Está claro que no quiere. Está claro
que no voy a esperar una disculpa de un hombre que no tiene remordimientos al referirse a una mujer utilizando un lenguaje violento hacia las mujeres, pero con lo que sí tengo problemas es con el uso que hace de las mujeres, nuestras esposas e hijas, como escudo y excusa de su mísero comportamiento. El señor Yoho dijo que él tiene esposa y dos hijas. Yo soy dos años más joven que la hija pequeña del señor Yoho. Y también soy la hija de alguien.
Doy gracias de que mi padre no esté vivo para ver cómo el señor Yoho
trata a su hija. Mi madre ha tenido que ver por televisión la falta de
respeto del señor Yoho contra mí en este mismo Congreso y estoy aquí
para demostrar a mis padres que ellos no me han criado para aceptar el abuso de otros hombres".
"Cuando
el señor Yoho habla así contra una mujer, está dando permiso a otro
hombre de hacer lo mismo a sus hijas. Usando ese lenguaje ante la
prensa, da permiso a que puedan usar ese lenguaje contra su mujer, sus
hijas, contra cualquier mujer de su comunidad, y yo estoy aquí para
decir que es inaceptable. Me da igual cuales sean sus
puntos de vista, da igual cuánto esté en desacuerdo con él o cuánto me
enfurece o cómo me siento cuando hay personas que deshumanizan a otros.
Yo no voy a hacer eso. No voy a consentir a la gente que provoque odio
en nuestros corazones".
"Por eso creo que tener una hija no es lo que hace decente a un hombre. Tener esposa no hace decente a un hombre.
Tratar a la gente con dignidad y respeto es lo que hace decente a un
hombre, y cuando un hombre decente se equivoca, intenta dar lo mejor de
sí y disculparse. No por salvar su imagen, no por ganar un voto, sino
que se disculpa sinceramente para reparar y reconocer el daño hecho para
que todos podamos seguir adelante".
"Por último, quiero dar las
gracias al señor Yoho por mostrar al mundo que puedes ser poderoso y
abordar a mujeres. Puedes hacerte fotos y proyectar al mundo tu imagen
de hombre familiar y abordar a mujeres sin remordimiento y con toda la
impunidad. Pasa cada día en nuestro país. Pasa en las escaleras del
Capitolio. Pasa cuando cualquier persona que está en la más alta
institución de este país acepta herir a mujeres y usa ese lenguaje
contra todas nosotras", sentencia Alexandria Ocasio-Cortez.